EL ASESINO DE 16 PRESOS POLÍTICOS ARGENTINOS LIBERADO EN MIAMI

El pasado 2 de Marzo, uno de los responsables directos de la Operación Condor, reclamdao por Argentina por el asesinato de 16 presos políticos (masacre de Trelew, 1972) fue liberado bajo fianza en Miami por el juez Robert Dubé, sospechoso de estar relacionado con la mafia cubano-americana. En la misma ciudad donde Luis Posada Carriles, y otros muchos terroristas han encontrado refugio, Roberto Guillermo Bravo, se ha convertido en un prospero empresario que vende sus servicios (material médico) al Ejército de los EEUU.
La detención de Bravo se produjo el pasado 25 de febrero, pero ni la prensa de Miami, ni la de aquí (preocupada por otros temas como ya sabemos)informaron de ello, como tampoco lo han hecho de su puesta en libertad unos días más tarde.
Bravo fue denunciado por 3 supervivientes de la masacre, que lo identificaron como el que fue rematando a las victimas. Su detención fue pedida ya hace dos años, por el juez argentino Hugo Sastre, sin que los EEUU, informados de su presencia en su territorio, lo arrestaran. Fue finalmente gracias a la persistencia de las autoridades argentinas que fue arrestado, aunque el país de las libertades seguro que tiene, como en el caso de Posadas, un camino legal favorable para esre asesino.
Bravo debera compadecer el 2 de abril ante el juez afin a la mafia cubana de Miami.
Bravo es ciudadano de los EEUU desde 1987, a pesar de que ya por entonces había sido denunciado en Argentina por estos crimenes, pero parece que ello no supuso ningún problema (incluso pudo ser un a ventaja). En varias ocasiones, Bravo ha contribuido a la financiación de las campañas del Partido Republicano.
Después de la masacre de Trelew, Bravo vivió escondido en la base naval de Puerto Belgrano, y después en la misión naval argentina de Washington.
Las relaciones entre la mafia terrorista de Miami y el Plan Condor fue el objeto de una vasta investigación del periodista norteaméricano John Dinges publicada bajo el título "Los años del Condor" en 2004.

Recordamos de paso que Washington acoge a Luis Posada Carriles y Orlando Bosch, autores declarados de la destrucción en pleno vuelo de un avión cubano en 1976, provocando la muerte de 73 personas, mientras que continua secuestrando a cinco cubanos detenidos por penetrar en las redes de la mafia cubano-americana.