¿HASTA CUANDO SEGUIRÁ URIBE?


Un nuevo escándalo sacude Colombia, y van.....Cae el jefe del Ejército colombiano por las ejecuciones extrajudiciales.
Los militares asesinaban a jóvenes y los hacían pasar por guerrilleros para conseguir ascensos. La unidad de derechos humanos de la fiscalía ha recibido 1.000 denuncias por desapariciones.
La espeluznante constatación de que colombianos humildes son asesinados y luego presentados como bajas en combate con la guerrilla obligó ayer al general Mario Montoya a abandonar la comandancia del Ejército. Sus días estaban contados después de que, por los mismos hechos, que erizan al país, fueran destituidos 30 oficiales de alta graduación, entre ellos tres generales.
El pasado domingo, Montoya declaró al diario "El Tiempo" su malestar por esa histórica purga, que se llevó adelante sin consultarle. Ayer, al anunciar su dimisión, volvió a defender a sus hombres. "Pido a los colombianos que no les condenen sin antes haberles concedido el derecho a defenderse", dijo. El excomandante se fue con aplausos de su plana mayor. No se descarta que algunos generales dimitan en solidaridad. Montoya será reemplazado por el general Gilberto Rocha, representante colombiano ante la Junta Interamericana de Defensa.
Las revelaciones en torno al caso de 11 ciudadanos asesinados en la localidad de Soacha obligaron al Ministerio de Defensa a crear una comisión investigadora de la cual había sido excluido Montoya. Pronto quedó demostrado que era cierto todo lo que se decía sobre esas "ejecuciones extrajudiciales".

Pero lo ocurrido en Soacha es apenas la punta del iceberg. El fiscal general del Estado, Mario Iguarán Arana, asegura que la unidad de derechos humanos de la fiscalía ha recibido más de 1.000 denuncias por desapariciones que pueden haber tenido el mismo fin.
La revista "Semana" acaba de reconstruir el escalofriante procedimiento: grupos mafiosos y personas vinculadas a sectores uniformados reclutan a jóvenes con pocos recursos con la promesa de trabajo. Los secuestran y luego los presentan como guerrilleros muertos en combate. "Hoy, en Colombia, el ascenso de un oficial se mide, en parte, por las bajas en combate. Si a esto se le suma una política de recompensas que premia el cadáver, se desemboca inevitablemente en excesos", agrega.
Hasta hace muy poco tiempo, el presidente, Álvaro Uribe, negaba estos crímenes. "El país eliminó en 1910 la pena de muerte", afirmaba. Las denuncias internacionales ayudaron a sacar a relucir el escándalo y han obligado a Uribe a pedir la máxima condena para los involucrados. Pero juzgarlos no es sencillo. Otros procesos contra militares por violación de los derechos humanos están empantanados. Las investigaciones son vistas por parte del Ejército fiel a Montoya como un triunfo judicial de la guerrilla. Montoya representa la línea más cercana a la doctrina de seguridad nacional que EEUU propagó por América Latina en la guerra fría.

Es en este contexto que el director de Human Rights Watch, el chileno José Miguel Vivanco, aseguró ayer que en Colombia "se comenten al año tantas violaciones de los derechos humanos como todas las ocurridas durante toda la dictadura de Augusto Pinochet en Chile".
Información enviada por Rubén.

3 comentarios:

  1. Una perla informativa de Pascual Serrano:
    Guerrillas paramilitares
    Como es sabido, en Colombia existen guerrillas de izquierda y paramilitares de derecha. ¿Cómo lograr que las masacres de los paramilitares sean confundidas por los lectores para que lleguen a la conclusión de que han sido las guerrillas? Sencillo, basta con escribir primero “Hay municipios como El Salado donde las guerrillas conservadoras y vinculadas al narcotráfico de los paramilitares entraron con 400 hombres y mataron a cien personas”. Y más adelante: “Y así, hasta completar 130.000 víctimas que según Human Rights Watch, cayeron en manos de la guerrilla”. Arreglado, todas las víctimas son de la guerrilla. Otra ingeniería de palabras de El País, ésta del 16 de octubre.
    Noelia

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  2. Pero como está el patio... Es una pena que PRISA, que ha hecho de la cobertura de las elecciones USA un escaparate de su imperialismo mediático (es que si no he oído 4 veces el arranque de Angels Barceló saludando a Argentina, Chile, Colombia, Panamá y Miami...), no se haga eco de este escándalazo. El crédito de Uribe es al parecer inagotable, y directamente proporcional al descrédito de la diplomacia actual. Vivir en Colombia es un puto infierno, lo extraño es cómo no se une la gente a las guerrillas para derribar ese desgobierno y refundar esa república. Pobre gente, y cuanto hipócrita en el mundo libre.

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  3. ¿Pq no cita a Human Rights Watch en colombia cuando conviene y sin decir nada de su financiación y cuando sus informes son sobre venezuela es una ong desprestigiada por los lazos con Soros??

    Rumbita

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